jueves, 30 de julio de 2015

The Vow

Acabo de terminar de ver The Vow, película basada en un libro de Nicholas Sparks, porque qué mejor cosa para hacer que ver una película romántica cuando solo tu perro te da cariño. En fin, buena decisión si me da ganas de escribir. 

La película -basada en una historia de la vida real, omg!- cuenta la historia de una mujer que olvida los últimos 5 años de su vida como consecuencia de un accidente de auto, y de cómo su esposo trata de reenamorarla, porque ella no tiene idea de quién es. Es una historia de amor que puede que sí o que no me haya sacado una lágrima. 

Es fuerte para el personaje femenino porque esta persona no reconoce para nada al ser que se supone que es ahora, ha cambiado tanto que no tiene idea de quién es esta mujer que le describen. Cambió de profesión, de ciudad, de pareja, dejó de hablarle por completo a su familia, se casó con alguien con quién no se habría imaginado que lo haría. Nisiquiera reconocía su estilo de vestir, de peinar, nada. Todo era diferente, porque el cambio es constante.

Y me llevó a una idea ya bastante recurrente: mi yo de hace 6 años no me reconocería. Por mucho tiempo mi ideología y acciones fueron sólidas y constantes, y de pronto en el 2009 hubo un punto de inflexión y todo comenzó a cambiar rápidamente. Si alguien me hubiera dicho hace 6 años y un poquito más que a estas alturas de mi vida ya no sería religiosa, estudiaría ingeniería ambiental, sería conocida por disfrutar de salir quizás un poco demasiado, lucharía activamente por los derechos LGTB+, en fin, tantas cosas, me habría parecido increíble. Es más, solo verme sería como ¿por qué tengo el pelo corto? ¿por qué estás usando maquillaje? ¡¿desde cuándo usas vestidos?! ¡¿tienes un tatuaje?! Tantos cambios que parecen chiquitos pero hace 6 años eran impensables.

La razón por la que pienso en esto seguido es porque siempre he sido muy radical con mi manera de pensar. Y mi manera de pensar ha cambiado muchísimo. Antes pensaba que solo la gente cristiana católica era buena. Pensaba que la única manera de vivir era siguiendo la manera de vivir del Opus. Pensaba que todos los demás vivían en pecado. Ahora pienso todo lo contrario. Y justamente por eso, me tengo que recordar que no debo ser radical. Si mi yo de hace 6 años conociera como soy ahora, pensaría que definitivamente soy un alma perdida y no entendería mi manera de actuar. Si mi yo de ahora conociera a mi yo de antes, probablemente pensaría "pobre mujer, me cae mal". Y justamente por eso es importante recordarme lo mucho que he cambiado y que todos siguen su propio camino.

Estoy tratando de ser menos dura con los demás, menos prejuiciosa, no saltarles al cuello a la primera. A lo primero que yo considere un error. Yo también fui completamente diferente, yo también pensé cosas que ahora definitivamente no apoyo; crecí. Conocí más, crecí y ahora pienso como pienso ahora. Y ahora tampoco tengo todas las respuestas, probablemente mi yo del futuro no esté de acuerdo conmigo en algunas cosas, no soy el epítome de lo correcto. Quizás en el futuro lea esto y piense "definitivamente no sabía todo lo que me faltaba por crecer". Y no, no lo sé. Eso me emociona también.

También pienso que si de alguna manera mi mente se reseteara y volviera a hace 6 años, llegaría a lo que soy ahora. Volvería a abandonar la otra carrera para ser ambiental, volvería a rebelarme como todas las veces que lo hice, volvería a luchar por lo que lucho, por mí. 

Soy quien soy por lo que fui, eso es innegable.

Y no cambiaría nada, no me arrepiento de nada, ni de lo que me hizo sufrir, ni de lo que me hizo feliz. Los errores que cometí son parte de mí, tanto como lo son mis aciertos. Miro a mi alrededor y estoy contenta con lo que he hecho, con quien soy. Con las personas que me rodean, con mi trabajo, y aún más importante, conmigo. Quizás mi yo de hace 6 años no me reconocería, pero mi yo de hace 5 años estaría aliviada de ver dónde estoy ahora; mi yo de hace 2 años estaría más que orgullosa; y mi yo de hoy, está realmente feliz de ser yo.

Es interesante parar a pensar en eso. ¿En quién me he convertido? ¿Cómo he cambiado? ¿Quién soy ahora? Espero que esas respuestas los hagan felices. 

jueves, 23 de julio de 2015

Feminismo blanco y la necesidad de interseccionalidad

Bear with me, porque sé que a muchos no les interesa para nada el ejemplo que utilizaré para ilustrar mi punto, pero me parece un muy buen ejemplo. 

El martes salieron las nominaciones a los Video Music Awards de Mtv y Nicki Minaj no estuvo nominada a Mejor video del año, cosa que no la hizo feliz, por lo cual tuiteó que "Anaconda" rompió records y fue un hito cultural, y que cuando tu video "celebra a mujeres con cuerpos muy delgados" sí te nominan por Mejor video del año. So, Taylor Swift se sintió aludida y respondió:


"No he hecho nada más que amarte y apoyarte. No es característico de ti poner una mujer en contra de otra. Quizás uno de los chicos tomó tu puesto.."

Y acá comienzo a explicar el real problema.

Taylor Swift está haciendo del feminismo su marca, y sé que realmente cree que entiende y representa los problemas de las mujeres, pero lo suyo es un caso claro de feminismo blanco (white feminism). Los problemas que enfrenta ella como mujer blanca y rica son completamente diferentes a los que enfrenta una persona de color con dinero, o una mujer de color pobre. Y lamentablemente no puede reconocer eso.

El problema es que Nicki Minaj estaba denunciando algo que consideraba una injusticia racial, y tiene derecho a quejarse independientemente de si tiene razón o no. Es verdad que elementos de la cultura afroamericana son vistos como grotescos en mujeres de color pero celebrados en mujeres blancas (ie twerking), o vistos como grotescos en mujeres gruesas pero celebrados en delgadas (ie twerking de nuevo). En fin, desigualdades hay por doquier, y eso es lo que ella realmente criticaba, no a TSwift en sí. Y ella perdió el punto y terminó convirtiendo esa denuncia en algo sobre sí misma y al final todos le prestaron atención a la "pelea" y no al problema real. Lo cual es lo que buscan los que quieren seguir perpetuando estas diferencias, invisibilizar los problemas reales. En vez de hacerle un favor al feminismo, Swift le metió cabe. Y eso pasa porque no ha desarrollado el pensamiento crítico holístico que debería tener una persona feminista (y en realidad todos), sino se ha quedado en lo superficial.

Este problema se da en todas las luchas, porque las personas no consideran otros factores que no son directamente la lucha específica. Por ejemplo, un círculo feminista que da charlas a mujeres cisgénero y hombres trans; si tu feminismo no incluye a las mujeres trans, no es un buen feminismo. Si tu lucha incluye a los hombres trans como si fueran mujeres, no estás respetando su identidad y estás perdiendo el punto. 

Eso también se da dentro de la comunidad LGBT, donde muchas asociaciones dejan afuera a las personas no monosexuales (bi, pan, etc) o a las personas trans, simplemente porque no consideran que sus problemas sean tan válidos, mientras insisten en que representan a todos. Los movimientos deben incluir a todos para ser realmente representativos, sino ¿qué tipo de lucha por la igualdad estás vendiendo?

Un par de ejemplos que he visto en Lima y realmente me molestan son: 1. carteles en inglés en la Marcha de las putas: ¿por qué harías un cartel en inglés EN LIMA cuando los que te joden son hombres que hablan español? ¿quién quieres que reciba el mensaje, el que te jode o Facebook? 2. Carteles en inglés en las marchas del movimiento LGTB, mismo problema. ¿A quién le estás dirigiendo el mensaje si está en inglés? 3. Mismo problema con los veganos, Go vegan! Todo esto hace que tu movimiento no sea inclusivo, ¡no sirve! Repito: ¿qué tipo de lucha por la igualdad estás vendiendo si no incluyes a todos?

Es importante parar a preguntarse ¿qué me quiere decir esta persona? ¿está haciéndome daño, haciéndole daño al movimiento, o está señalando un problema que quizás yo no experimento y por eso no se me ocurrió que existía? Es fundamental darnos cuenta de que justamente por nuestra posición hay factores que no vemos normalmente, simplemente porque nunca nos pasó y por tanto nunca supimos que era un problema. Claro que TSwift puede enfrentar desigualdades por ser mujer, pero eso no quita que disfrute de los privilegios de ser delgada, atractiva y blanca dentro de una industria que ama eso. Claro que podemos tener todas las buenas intenciones del mundo, pero a veces nuestros actos hacen más daño que bien y es necesario parar a analizar el punto del otro antes de responder. 

Otro punto a tomar en cuenta es que no está mal pelear con otra mujer. Si decimos que no es feminista criticar a otra mujer, entonces estamos negándonos la posibilidad de crear una discusión alturada e impulsarnos hacia adelante. Es tratar a las mujeres como seres indefensos que no pueden soportar críticas, y es negarnos la posibilidad de denunciar injusticias, cosas mal hechas, o malos tratos. Si Swift realmente viviera nunca poniendo a una mujer en contra de otra, no habría escrito "Bad Blood", porque está criticando a otra mujer. Y está bien y debería escribirla si cree que es la manera de lidiar con el problema, porque no vas a dejar de quejarte porque te hicieron daño solo porque ese daño lo hizo una mujer. Eso es darle un pase libre a todas las mujeres de actuar pésimo sin tener que ser criticadas por ello. Y eso es estupidísimo, tus acciones deben poder ser juzgadas sin importar si eres hombre o mujer, sin importar el género de quien te juzga. 

Y el último punto, los hombres no son el enemigo. Decir que "quizás uno de los chicos te quitó el puesto" tratando de que los hombres sean vistos como los malos y como los que no merecen estar en la categoría, es recontra infantil. Si hay hombres que han hecho videos buenos este año, merecen la nominación. Si hombres hicieron mejores videos que todas las mujeres, merecen todos los cupos (y también preguntarnos ¿por qué ha pasado esto?). No es cuestión de ser hombre o mujer, es cuestión de haber hecho el mejor trabajo. Y dentro de academias, la de Mtv debe ser la menos problemática. Basta con ver los nominados. 

 

Más personas de color que blancas, casi igual proporción hombres y mujeres, e incluso nominaron un video cargado de críticas al sistema de justicia de EEUU y su racismo (el videazo de Kendrick Lamar). 

El feminismo blanco de TSwift necesita muchos arreglos y una apertura de ojos inmediata, espero que siga en el camino hacia aprender y poder ser crítica de las desigualdades, de todas, no solo las que le afectan directamente, y que también pueda reconocer cuando no es su lugar el de dirigir la lucha. 

Por nuestra parte, espero que estemos más abiertos a conocer y reconocer realidades diferentes, y tener el criterio suficiente para saber cuando debemos escuchar y entender a los demás, pues solo con empatía podremos generar un cambio real.  

viernes, 3 de julio de 2015

No me salves (yo me salvo sola)

Nota del autor: Esta entrada la escribí en uno de mis moleskines el 16 de marzo del 2014, después de salir de una relación algo tormentosa y antes de embarcarme en nuevas aventuras por esos lares. La idea era escribirlo acá eventualmente pero siempre se quedaron como bullet points y no como un texto completo pues nunca lo redacté. Al ver que nunca será texto, les dejo los puntos. Aquí algunos recordatorios que siempre sería bueno tener en mente: 



  • Si tengo que rogar por tu amor, nunca seré suficiente.
  • Si lo que sientes no es fuerte, no me salves.
  • No es mi deber ni función ser masticada y escupida por mi pareja solo para que el neandertal evolucione.  
  
Sexy neandertal.
  • No es un proyecto. No voy a cambiarlo.
  • No es la excepción a la regla. Solo no es. 
  • Tú vas primera y segunda y tercera.
  • O es el mismo nivel de compromiso, o no sirve.
  • Lo quiero todo y lo merezco todo.
  • Comunicación + consenso = todo bien.
  • Nada se asume.
  • No imaginaba la vida sin ti y ahora todo bien.
  • No te tengo que convencer de nada. No me haces un favor. 
Suerte amigos y aléjense de las cosas que no los hacen crecer.