martes, 10 de septiembre de 2013

Expectativas vs Realidad: Tito Edition

Para los que me siguen y no me conocen en la vida real, deben saber que llevo años queriendo un perro. AÑOS. Mi anhelo era tan grande que todos los años desde un mes o dos semanas antes de mi cumpleaños, sueño que me van a regalar un perro todas las noches. Y todas las mañanas del 2 de julio, me levantaba feliz con los saludos de mi familia, pero siempre quedaba la tristeza de saber que, de nuevo, no vino el perro. Ni por los 15, ni los 18, ni nada.

Traté de convencer a mis padres por todos los medios posibles que tener un perro era lo mejor que podrían hacer para el hogar, para los hijos, la familia. Ellos siguieron diciendo que no mientras tuviéramos alfombra, porque la casa apestaría. 

Este año POR FIN nos deshicimos de la alfombra y, coincidentemente, nacieron los pugsitos de una amiga. Fue como si todos los planetas se alinearan para recibir al baby perri, y por fin, Tito entró a mi vida. Para bien, ¿no?

Acá una lista de cosas que sinceramente creíamos que pasarían y, bueno, no tanto...

Expectativas vs Realidad: Tito Edition

Expectativas: "Mamá, Tito nos va a hacer mucho más responsables, voy a tener que levantarme temprano para sacarlo a pasear, ya no seré solo yo que puedo llegar tarde a clases, tendré que levantarme por él porque me va a necesitar..."
Realidad: Tito duerme más que yo. Duerme todo el día. Me paro de la cama en la mañana -porque es un engreído y duerme conmigo- y él se levanta con sus ojitos de "vuelve a echarte que hace frío, plis". Me alisto y se acerca a mí con ojitos de "tengo sueño, vamos a echarnos". Bosteza...y me echo de nuevo. Imposible llegar a tiempo.

Expectativas 0. Realidad 1

Expectativas: "Mamá, mi cuarto ya no va a estar desordenado, voy a tener que recoger toda la ropa y guardarla, mis hermanos van a tener que guardar sus juguetes, ¡por fin vamos a ordenar!"
Realidad: Casi toda la ropa sigue tirada en el piso, solo se recoge estratégicamente cuando Tito así lo demanda, ahora es el escritorio el que está más desordenado. Hermanos van por la misma línea. Fallamos.

E: 0 R: 2

Expectativas: Voy a amar a Tito con locura desde el primer momento, me desviviré por él.
Realidad: Me demoré en desarrollar sentimientos profundos por él, recién estoy comenzando, es un gordo lindo pero siempre me olvido de que existe. Lo quise por tanto tiempo que ahora que es real no lo puedo terminar de integrar en lo que considero "cotidiano", parte del día. Y alguna vez he dicho "Ahhh perro, ¡sé independiente! ¡Malogras el plan!". Sep, no tanto como desvivirse.

E: 0 R: 3

...Podría seguir con una lista más larga pero ya noté que no es muy entretenida. Solo quería decirles, lectores queridos, por fin tengo el perrito que quise tanto tiempo. Han sido dos meses retadores pero lindos, siempre me olvido de su existencia pero me alegro al recordar que hay un gordo con cola enrollada esperándome en casa, feliz, saltarín. A veces también me harta, como cuando se orina de nuevo en las alfombras principales, o cuando se va corriendo detrás de los corredores en el parque y me asusta como nunca me he asustado. Una vez persiguió a un corredor por el Pentagonito muy rápido y yo soy lenta y todo mal, fue terrible, por suerte paró.

Me hace pensar en cómo será tener hijos, me aterran un par de cosas:

1. No amarlos de inmediato, como me pasó con Tito
2. Lo horrible que debe sentirse perderlos, qué terrible debe ser, si tan solo pensar en la posible muerte de este perrito es insoportable. No existirá otro Tito, y nisiquiera sé qué es. A veces lo imagino como un montón de músculos y un genoma diferente, qué pensará.
 3. Una vez leí que tener un hijo era como arrancarte el corazón y verlo correr por la casa. A veces me siento así cuando veo a Tito por ahí corriendo. Obviamente sé que un hijo debe ser mil millones de veces más intenso y QUÉ FUERTE. 
4. Yo alguna vez cogí una bolsa llena de dulces y salí de Wong, sin pagar y sin supervisión, crucé la pista y fui al carro. Sola. A los 3 años. Qué horrible hija fui, mi mamá la debe haber pasado horrible.
5. Entiendo por qué los padres pueden ser tan "padres locos". Imagínate, esa cosa estuvo en ti, es tuya, y ahora no te habla y siempre llega borracha. WTF dude. 

Eeeen fin, me fui completamente por las ramas. Tito todavía se hace pichi en todos lados, no sabe hacer amigos sin caer pesado y a veces fastidia mucho, pero Tito es lindo. Si no me creen, mírenlo:


Ese es mi gordo y así lo quiero. :3


Btw: Se aceptan consejos de cómo educarlo para que no sea pichón ni ladilla. Merci.

8 comentarios:

Mao. dijo...

Más vale periódico en mano que pichi volando

Anónimo dijo...

Has que mee en un periodico y utiliza el periódico meado y seco para que reconozca el olor y solo mee ahi.

suerte!!

Anónimo dijo...

Es el perro más feo que he visto en mi vida

Jesus S dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Jesus S dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Junio Condensado dijo...

"5. Entiendo por qué los padres pueden ser tan "padres locos". Imagínate, esa cosa estuvo en ti, es tuya, y ahora no te habla y siempre llega borracha. WTF dude. " jajajaj me mataste con esa

Robertito dijo...

TITO TOMO EL CONTROL DE LA SITUACION, o mai gatoooo!! pintalo con spray..

Jesus S dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.