miércoles, 8 de diciembre de 2010

Cosas que te pasan cuando ordenan tu cuarto

Nótese que dice "ordenan" y no "ordenas". Son dos casos muy diferentes.

Eso de "el desorden de mi cuarto está ordenado" no es mentira.

La última vez que ordené mi cuarto fue el 1° de julio. Desde entonces, se fueron desordenando los cajones, apilando los papeles, moviendo las cosas... Desorden. Pero no es desorden porque sabía dónde estaban las cosas. iPod en el primer cajón de la mesa de noche, ganchos y demás en el escritorio, ron en el clóset. Aparte compré unas cajas para los cds y las pinturas, para tenerlos siempre a la mano.

Lamentablemente, mi cuarto también es el depósito de mi madre, como dije una vez. Ahí es cuando se hace desorden de verdad. Peor cuando deciden ordenar.

El otro día llegué a mi cuarto y de repente mis cajones estaban semivacíos, ordenados. Mi closet estaba ordenado, habían movido todo. Encima metieron un par de maletas en el cuarto. Un desastre.

El punto es que hoy me pasé horas, en serio horas, buscando mi dinero. No lo encontraba. Dentro de todo el nuevo orden no lo encontraba y no entendía que hacían los posters en un cajón y no en el closet, los pasadores en el segundo cajón y no en el del centro, dónde estaba mi iPod (aún no lo ubico) y demás. ¡¿Por qué hacen eso?!
Literalmente le mandé mensajes a mis amigas preguntándoles si por casualidad habían traspapelado 150 soles entre sus cosas. O encontraba ese dinero o no comía un mes.

Una cosa es ordenar tú porque sabes dónde estás poniendo las cosas, aún al desordernar, sabes dónde pones todo. Cuando alguien más lo hace te pierdes, es como Inception, te das cuenta de que esa no es tu idea.

Las cosas serían mejores si yo fuera ordenada de por sí. Pero no. Desordeno y soy feliz poniendo todo donde sea, me ubico y con eso basta. Debería bastar, es mi cuarto. Pero no.

Cuando por fin localicé mi dinero, entre dos cds en mi caja de cds y nisiquiera lo encontré yo, ya había perdido como 3hrs, en las que también había revisado el cuarto de mi mamá. Grande Rosita, ella sabe mejor que yo donde pongo mis cosas. Porque luego recordé que tiré los billetes a la caja, que los cds justo se habían abierto entre James Blunt y Juanes y luego ordenando los cerré.
No se me había ocurrido buscar entre cada disco. Los movía como a un bloque.

Otra cosa que noté al buscar mi dinero fue que hay un cajón que se mantiene casi igual desde hace más de 5 años. El último de mi mesa de noche. Tiene cosas inútiles, como una rodillera, cables de celulares que ya no existen y un celular viejo, que siempre digo "algún día dejaré esto donde se debe." Aún no sé dónde se debe y por eso lo almaceno. También tengo una cosa que canjeabas con Chizitos del año 2003, como un puaj, que extrañamente se reduce con el paso de los años.

Algún día ordenaré todo como se debe. Ese día se acerca, por´ahí dicen que será
en verano.

Nos vemos.

2 comentarios:

Azul dijo...

Jajajaja, yo también tengo uno o dos cajones con esas cosas que "algún día dejaré donde se debe". Pero en general mi cuarto no es desordenado, será porque lo único que muevo es mi ropa y lo básico (ipod, nextel, plata, documentos), que lo tengo en mi mesa de noche. Eso sí, ese único cajón de mi mesa de noche es un desastre :P

Jorge Pereda Ibañez dijo...

el verano es el tiempo de lo posible (o debería ser imposible), haces todo lo que quisiste hacer y no lo hiciste o será para el próximo pues. Por otro lado, tu puaj se deshidrata, por eso se reduce. Yo he encontrado algunos recontracagados abajo de armarios y escritorios. jaja